Reforzamiento Ajedrecistico 2023
10 RAZONES PORQUE EL AJEDREZ ES BUENO PARA EL NIÑO NIÑA, Y/O ADOLESCENTE...
Memoria:
El juego del ajedrez les obliga a recordar las reglas y las jugadas que van ejecutando. Aprender este tipo de pasatiempos puede influir positivamente en el rendimiento de los niños en otras actividades y/o asignaturas.
Análisis y síntesis:
En una partida de ajedrez, el jugador se encuentra ante una encrucijada, debe analizar las múltiples posibilidades, sintetizarlas para elegir una y plantear un contraataque a su adversario, desarrollando así su pensamiento crítico.
Resolución de problemas y toma de decisiones:
El ajedrez obliga a sus participantes a tomar decisiones con responsabilidad. Durante la partida, el niño se enfrenta a diferentes problemas y debe aplicar una estrategia a la vez que tiene en cuenta la del contrario. El tiempo es un factor importante en la partida, por lo que, además, el niño aprende a tomar decisiones bajo presión.
Empatía:
Durante el juego, el niño se pondrá en la piel del otro jugador, ya que se anticipará y se preguntará “¿Y ahora qué movimiento hará?”.
Socialización:
Para participar en esta actividad, no es necesario compartir con el adversario raza, nacionalidad, idioma o edad. En este sentido, el ajedrez es integrador y enseña a los niños a no discriminar. El lenguaje del ajedrez es un lenguaje universal.
Creatividad e imaginación:
En este juego no solo es necesario estudiar jugadas y seguir un patrón de movimientos determinado, sino que en ocasiones es interesante desarrollar la imaginación y prever diferentes posibilidades de lo que puede ocurrir durante la partida. Asimismo, es necesario crear jugadas sorprendentes e inesperadas.
Aceptación de reglas:
Como en cualquier otro juego, el ajedrez cuenta con sus propias reglas cuyo incumplimiento no es aceptable en ningún caso.
Concentración:
El ajedrez exige tanta concentración, que no es extraño encontrar a sus jugadores completamente aislados del ruido exterior mientras están enfrascados en una partida.
Organización y planificación:
Los juegos de estrategia se han revelado como una forma extraordinaria de desarrollar la parte de nuestro cerebro que se dedica a la planificación, la gestión del tiempo y la organización.
Inteligencia emocional:
Favorece el equilibrio entre lo racional y lo emocional, haciendo que los pequeños acepten y aprendan a encajar tanto los triunfos como los fracasos.